Hemos tenido ocasión de leer
un artículo que nos parece interesante reseñar.
Aborda la tendencia actual de la legislación sobre cooperativismo en las comunidades autónomas, y en Cataluña en particular. Apela a la necesidad de influir en estos desarrollos legislativos para impedir que la democracia interna, que es la principal característica del cooperativismo, pierda peso en el modelo resultante de las modificaciones legislativas, modelo que, según el artículo, parece centrarse únicamente en el cooperativismo de trabajo como fórmula de autoempleo en un mundo mercantil, dejando de lado su propuesta de un modelo económico diferente al capitalista.
Estos procesos de incidencia política deben ser, sin duda, una de las principales funciones del asociacionismo cooperativo en el que Cooperama participa.